La epigenética de los viajes
VIAJEMOS
Sospecho que si están leyendo esto es porque que están vivos.. Y si están vivos entonces tienen la posibilidad de decidir hoy mismo hacer el viaje de sus sueños, no importa a donde sea, no importa qué tan lejos haya que ir, cuantos océanos haya que cruzar, lo que haya que dejar o las adversidades que haya que enfrentar, hoy podes agarrar tu mochila, valija o bolso y hacerlo realidad.
En esta reflexión quiero recordarles que nunca es tarde para cumplir sus sueños..
Y mientras vos lo estas pensando otros ya lo están haciendo!
Y es que mi personalidad no aguanta más de tres meses quieta, necesito moverme, conocer nuevos lugares, culturas, paisajes, personas. Cuando estoy en movimiento me siento viva, real, sana, feliz. No importa que tan grande sea la ciudad, si tiene montaña, mar o historia. Necesito conectarme con lo nuevo y lo desconocido, con la naturaleza, necesito vibrar en la frecuencia del viento, de la marea, del sonido de los animales o de la brisa en la inmensidad de una montaña, porque ahí es cuando siento que todo está bien en mi mundo.
Porque viajando siempre estoy en mi mejor versión y vibro en mi mejor frecuencia.
Podría decir que viajar cambió mi vida. Aquí que mis colegas Biotecnólogos me juzguen, pero diría que algo cambió en mi ADN, lo llamaría “la epigenetica de los viajes” porque desde que viajé por primera vez se despertó en mi la necesidad incontrolable de conocer el mundo, explorarlo, respirarlo y vivirlo.
Por eso no pienso parar!
A vos te hablo que estás ahí pensando si te vas o no de viaje.. opino que ya no tenés nada que pensar, si la idea se plantó en tu mente es una señal, no la ignores.